Mientras que en la era 2010 se desató la euforia por buscar el rango de "influencer" acumulando seguidores en forma masiva haciendo prácticamente lo que fuera, un nuevo fenómeno conjunto fue creando una fuerza que está tomando impulso y de acuerdo a nuestras predicciones tocará su punto máximo durante 2024:
Los nanoinfluencers son creadores de contenido con un tema especializado, generalmente de nicho, que tiene un alcance muy modesto, de 1,000 a 10,000 seguidores, pero que por su naturaleza "auténtica" son fieles seguidores, entusiastas y están atentos a su mensaje en forma mucho más eficiente que a los influencers masivos llenos de bots y de temáticas dirigidas más por las tendencias que por la exploración de alguna especialidad.
De acuerdo a Business Insider, esto se ve reflejado en el dramático aumento de los ingresos de estos nanoinfluencers. Mientras que en USA, en 2015 recibían un ingreso promedio de $25USD por un post patrocinado, para 2021 el precio promedio fue de $901 USD, lo que significa un ingreso 36 veces mayor.
Aunque este efecto benéfico también lo están sintiendo los microinfluencers (de 10,000 a 100,000 seguidores) lo fantástico para tu marca es que los presupuestos manejados con un nanoinfluenceer en latinoamérica aún está dentro de los alcances posibles para marcas pequeñas por lo que no resulta descabellado que tomes en cuenta este poder para difundir tu marca o producto.
El diseño de una campaña con nanoinfluencers debe hacerse cuidadosamente para que realmente te permita tener más clientes. No basta poner la mención con el creador, sino encontrar la forma en que naturalmente tu marca o servicio embone con el contenido y se perciba como un beneficio para los seguidores, más que un comercial.
Si bien puedes ir directamente a las fuentes, es decir, hacer tu búsqueda y contactar directamente con ellos, esto no resulta a la larga eficiente para la ejecución de campañas. Un buen punto de inicio es a través de directorios especializados como Voxfeed o Heepsy que en ocasiones te dan además herramientas de evaluación y seguimiento.
Antes que nada, como siempre, debes establecer claramente tus objetivos. ¿Deseas posicionar tu marca o buscar un efecto directo en ventas?
Una vez definido el objetivo debes pensar en el perfil de tu cliente ideal, para entender a quién o a qué tipo de nanoinfluencer puede seguir. Por ejemplo, si vendes teclados, seguramente que tus clientes tienen la necesidad de escribir constantemente en una computadora, por lo que puedes elegir a comunidades de escritores o bien a comunidades de programadores.
Una vez definido el perfil de la comunidad y sus necesidades, ahora sí puedes buscar a un nanoinfluencer que trate de los temas que atraen a la comunidad que quieres impactar.
Finalmente debes definir tu presupuesto de acuerdo al objetivo. Si es una campaña de posicionamiento (awareness) establecer el costo por persona impactada, si se trata de una campaña de ventas o generación de más clientes, debes decidir el costo de adquisición que estás dispuesto a pagar para cruzar esa información con el costo de cada mensaje patrocinado con el nanoinfluencer.
Recuerda que ninguna estrategia de marketing real despega sin presupuesto. No importa lo que te digan los cursos, los marketeros principiantes o incluso las plataformas, la adquisición de más clientes siempre tiene un costo y este costo debe estar alineado con las ganancias que quieres generar, así que no descartes apoyarte en agencias profesionales que te ayuden a evaluar los beneficios de esta estrategia que, aunque accesible, debe ser ejecutada con precisión para evitarte desperdicio de recursos.